LOS CUATRO YUGAS (TIEMPOS)

Cosmovisión hindú sobre el tiempo:

Es reveladora la visión de los antiguos sabios védicos sobre cómo todo lo que vivimos como seres encarnados está sujeto a la llamada Rueda del Samsara (Rueda de la Existencia). Si los seres somos un microcosmos fractal del macrocosmos, podemos inferir entonces que todos nacemos, vivimos y morimos para volver a renacer una y otra vez dentro de la maquinaria cósmica; siendo esto un cuadro cíclico. De hecho, si fuéramos conscientes de las vivencias relacionadas con anteriores vidas, podríamos seguramente profetizar los acontecimientos universales futuros.

En la tradición hinduista, los Yugas son ciclos temporales; un yuga (‘era’ en sánscrito) es cada una de las cuatro eras en la que está dividido un majā yuga (‘gran era’ o gran ciclo), que dura 4.320.000 años. El mundo pasa por un continuo ciclo de estas épocas o eras. Cada satya-yuga (la primera de las cuatro eras) se va degradando hasta convertirse en kali-yuga (la última de estas eras); luego viene una etapa de renacimiento que no se describe en las Escrituras, y comienza otro satya-yuga seguido de otra fase descendente,y así se repite y nuevo ciclo. 

El descenso de satya-yuga a kali-yuga está asociado a un progresivo deterioro del dharma (‘deber religioso’ -correcto proceder.), manifestado en un decrecimiento en la duración de la vida de los seres y la calidad de los estándares morales.
Plantean los sabios hindúes que cada yuga es una era con características específicas en las que aparecen las encarnaciones de Krishna (Ser iluminado). Un millar de estos majā yugas equivalen a un día de Brahma (Dios creador), que se denomina kalpa. Esta cosmovisión nos habla de que la esperanza de vida de Brahma se encuentra a 100 años de su tiempo (recordando que cada año de Brahma equivale a un millar de majā yugas). En cada yuga hay un proceso específico de autorrealización [yuga dharma] (desarrollo espiritual).

Ahora veamos algunos interesantes conceptos sobre la visión védica del tiempo:

DÍA Y NOCHE CÓSMICA:

El MANVANTARA: Este es un período de actividad universal, de manifestación del cósmica que corresponde al día cósmico opuesto al pralaya (reposo y/o disolución). Un manvantara comprende 71 majā yugas, los cuales equivalen a una catorceava parte de la vida del dios Brahmā, 12 000 años de los dioses, o 4.320 millones de años de los humanos Cada uno de esos periodos es presidido por un Manu especial (Padre de la Humanidad). Según el hinduismo, ya han pasado seis de estos Manvantaras; el actual es el séptimo, y es presidido por el Manu Vaivasvata. Faltan siete Manvantaras para completar los 14 que conforman una vida completa de Brahmá, el del llamado Manvantara, o “cambio” de Manu.

«Al terminar la Noche de Brahma comienza de nuevo la creación de los tres mundos, que existen durante los períodos de vida de catorce Manus consecutivos (...) Al final del Día, la poderosa manifestación universal se funde en la oscuridad de la Noche, y todo queda en silencio.» 
(Bhagavata Purana 3,11:23,28)

El PRALAYA: este es el período de disolución y reposo universal que sobreviene al fin de un Manvantara (Es un período de ocultación planetario, cósmico o universal; lo opuesto al Manvantara).

El MAHÂ-PRALAYA, El Gran Pralaya (Noche cósmica o disolución del Universo) en contraposición al Mahâ-Manvantara; es el período de ocultación o “no actividad” de un planeta. Tiene la misma cantidad de años que el Mahâ-kalpa o Mahâ-Mahamvantara: 311.040,000.000.000, de años. Al llegar la Gran Noche, el Espíritu Universal de Vida, se sumerge entre el Espacio Abstracto Absoluto durante 7 Eternidades. Es el Pralaya final, la muerte del Cosmos, la reabsorción del universo. En él todas las cosas se resuelven en su original elemento único; los mismos dioses (Brahma y compañía...) mueren y se disuelven durante la extensa Noche.

Edades dentro de un Manvantara:

En el hinduismo, un kalpa equivale a 4.320 millones de años; que es un único día de Brahma o Manvantara, y está compuesto de los 4 ciclos que forman el ciclo majā yuga, y este a su vez contempla los ciclos de 4 yugas o eras (dependiendo del yuga varía su duración).

Los cuatro yugas, junto con su duración en años terrestres son:

Satya Yuga (edad de oro) = 1.728.000 años / 71,42 = 24.195 años
Treta Yuga (edad de plata) = 1.296.000 años / 71,42 = 18.146 años
Dwapara Yuga (edad de bronce) = 864.000 años / 71,42 = 12.097 años
Kali Yuga (edad de hierro) = 432.000 años / 71,42 = 6.048,62 años

................................................................................................................................
Majā Yuga = 4.320.000 años / 71,42 = 60.486,2 años

Analizando las cifras y convirtiéndolas en porcentajes, el primer periodo es el 40% del ciclo, el segundo es del 30%, el tercero del 20% y el último es un 10%; es decir que cada ciclo dura un 10% menos que el anterior.

40% Satya Yuga
30% Treta Yuga
20% Dwapara Yuga
10% Kali Yuga

...............................................................................................................................
100% Majā Yuga

(40% + 30% + 20% + 10% = 100%)

 [Satya Yuga + Treta Yuga + Dwapara Yuga + Kali Yuga = Maja Yuga.]

«Dado que al Kali Yuga le corresponde un 10% del tiempo total; el Majā yuga dura 10 veces más.»

Se dicen años terrestres, porque en la escritura hindú se habla de los años como años-tiempos divinos de acuerdo con el cálculo de los dioses. Hay que tener en cuenta que el número básico es 432.000, la era de Kali Yuga, y así Dvapara es el doble de ese número, Treta es 3 veces ese número y Satya lo es cuatro veces. El tiempo transcurre dentro de estos grandes períodos, yuga tras yuga, kalpa tras kalpa, cíclicamente.

Para dar un ejemplo de la magnitud de los números expresados aquí, vamos a observar ahora el tiempo existencial de Brahma (dios que creo el universo según la cosmovisión hindú). El lapso de la vida de Brahma se calcula en función del tiempo yuga. Un kalpa es decir 1000 yugas son 12 horas del día de Brahma, por lo tanto, su día de 24 horas que sería entonces de 2 kalpas de duración. Esto significa que 24 horas del tiempo de Brahma son 8,640,000,000 años humanos. Su año es de 365 días y vive a unos 100 años. Bajo estos números resulta complicado calcular la dilatada vida de Brahma, 

Brhama, dios creador según el hinduísmo. 
«En la cosmovisión védica no existe un solo universo, sino una multitud de estos; todos con sus propios dioses, los cuales vienen y van como moscas. » 

De acuerdo a la visión hindú de lo que es un “Año Cósmico”, el sol y sus planetas giran alrededor de un gran centro de poder creativo llamado “Vishnu Nabhi” (el asiento de Brahma) durante 24,000 años y está compuesto por 2 ciclos de 4 “Yugas”.

En el punto más cercano de dicho centro que sucede cuando el equinoccio de otoño se encuentra en el primer punto de Aries, el estado de “Dharma”, la virtud mental se encuentra tan desarrollada que el ser humano puede comprender todo, incluso los misterios del Espíritu. Este punto es el inicio de Satya Yuga.

A continuación analizaremos más profundamente los 4 yugas...

SATYA YUGA, la primera de las edades del mundo.

Esta es la primera de las cuatro eras (yugas) de los brahmanes llamada también Krita-yuga. Consta de un período de 1.728.000 años de duración; en este lapso reina la verdad y se mantiene firme la justicia, y ningún beneficio reporta la iniquidad a los hombres. En ella la humanidad apenas se ha separado de su estado original de inocencia y se encuentra completamente integrada a la divinidad. Comprende la vibración de la Energía Cósmica Creativa que produce Prakriti (manifestación).
El promedio de vida es de unos 100.000 años (Leyes de Manú, 1, 81). El proceso de liberación espiritual o autorrealización en este yuga es dhiana (o meditación) en Visnu, o en el sonido "ONG", que es la vibración divina. Durante este yuga la mayoría de la población se encuentra en modalidad de bondad, y su esperanza de vida promedia los 100.000 años.
En este yuga más elevado, todas las personas puede experimentar la espiritualidad por intuición directa. El velo entre los reinos de lo material y lo transcendental se vuelve casi transparente. Es un periodo libre de cualquier tipo de infelicidad o miseria. Satya-yuga es también llamado la Era Dorada o Edad de Oro.

TRETĀ YUGA

Treta-yuga, también llamada la Edad de Plata, dura 1.296.000 años.
La edad de oro va menguando, en ella el poder de la verdad comienza a velarse dejándola manifestarse solamente en un 75%. El ser humano se vuelve más frágil y comienza a recitar el sonido “SO HANG", que significa "yo soy Tú". 
Si bien comienza a sentirse separado, aún reconoce el deseo de volver a lo divino.
El proceso de la autorrealización es la realización de yajnas (sacrificios opulentos).
El promedio de vida es de unos 10.000 años. Es durante esta época que se introduce Varna- ashrama -dharma.

DVĀPARA YUGA

Es la edad de bronce (o era del cobre), este período dura 864.000 años. Aquí las cualidades divinas se reducen en un 50 %; disminuye la armonía, la paz, el bienestar, también el promedio de vida humana. Mientras que en los yugas anteriores los humanos vivían miles y miles de años, durante esta época solamente vive unos 1000 años.
En sánscrito, dvā-pára significa ‘el lado del dado marcado con dos puntos’ y por antonomasia: ‘dos’ o ‘segundo’. Entonces dvā-pára yuga significa ‘segunda era’ o ‘la era con el número dos’. Sin embargo esta era es la tercera (después de Tréta) ya que el orden de las cuatro eras se trastocó en esta época en particular, y la ‘tercera era’ (Tretá) vino antes que la ‘segunda era’.
El proceso de la autorrealización es archana, la adoración de las deidades en los templos.
El fin de esta era está relacionado con la muerte del dios Krishna, y los sucesos descritos en el Majábharata.

KALI YUGA

Esta es la última era, la cual es conocida como edad de hierro. En este período reina la hipocresía y el conflicto. La misma dura 432.000 años. La conciencia sobre lo esencial se reduce al 25 % de la población, y la esperanza de vida es de sólo 100 años. 
Según los cálculos hinduístas actualmente estamos transitando el Kali Yuga, que se inició hace poco más de 5000 años. Se espera que para el final de esta era, la gente difícilmente supere los 20 años de edad; y su único alimento será la carne.
El proceso de autorrealización es sankirtana y dāna, el canto de los Santos Nombres del Señor y ‘dar’ (caridad).

Las escrituras Védicas recomiendan para esta oscura era cantar: Harer nama, harer nama, harer namaiva kevalam / Kalau nasty eva, nasty eva, nasty eva gathir anyhata. Que significa: Cantar el nombre de Hari, Cantar el nombre de Hari, Cantar el nombre de Hari es el principal medio de alcanzar liberación en la era de Kali, no hay otra manera, no hay otra manera, no hay otra manera.
Es decir, el canto de los Santos Nombres de Dios, de forma colectiva (kirtan) o individual (japa) es una manera de alcanzar la liberación del espíritu de la contaminación material provocada por la riña e hipocresía que caracterizan a esta era.

El Vishnu Purana, uno de los textos sagrados más antiguos de la India, describe el Kali yuga de la siguiente manera:

“En el Kali Yuga, habrán numerosos gobernantes luchando por el poder entre ellos. Ellos no tendrán carácter. La violencia, las mentiras y la inmoralidad estarán a la orden del día. La piedad y la naturaleza del bien se desvanecerán lentamente. La pasión y la lujuria serán la única atracción entre los sexos. Las mujeres serán simples objetos de placer sexual. La mentira será la línea límite de subsistencia. La gente culta será ridiculizada y puesta en vergüenza; en el mundo la ley del más rico será la única ley.”

Pero contrariamente en el mismo Vishnu Purana se lee: “¡Excelente, excelente el Kali-Yuga! Lo que en la Edad de Plata o la de Bronce costaba largo tiempo y penosos esfuerzos, en el Kali-Yuga se realiza en un día y una noche.”
Literalmente kali significa ‘el lado del dado marcado con un uno’. No se debe confundir con la diosa Kālī, fundamental en el hinduismo.

En el Kali Yuga la vibración se ha vuelto muy sombría y la humanidad está forcejeando contra pesados obstáculos. La rectitud ha descendido hasta un escaso cuarto de su fuerza original. A lo largo de nuestra historia actual, hemos creado y hemos sido acometidos por todos los males. No es de extrañar, entonces, que la raza humana esté pasando por tiempos difíciles. Pero el punto crítico ya ha llegado y el amanecer una vez más difunde su luz sobre un confundido e ignorante Planeta.

Como mencionamos anteriormente estos 4 yugas juntos hacen al MAJĀ YUGA.

Satya, Treta, Dvapara y Kali completan un Majā-Yuga (‘gran era’).
Una sucesión de 71 Majā-Yugas completan un Manvantara (‘intervalo de Manu’), la vida de un patriarca Manu. Al final de cada Manvantara hay un periodo igual de tiempo (71 Majá-Yugas) durante el cual el «mundo» (que puede ser este planeta o el universo entero) es inundado; entonces el ciclo comienza nuevamente.

‹La rueda del tiempo es mecánica, todo lo que sube, baja, todo retorna, todo se repite constituyéndose así el sistema para mantener al mismo sistema siempre activo.›

Quien consiga escapar de la rueda de nacimiento y muerte, puede hacer su propia "Rueda del Tiempo"; o sea, su propio sistema universal. A partir de entonces será un creador de sistemas holográficos. Hay que recordar que el universo es mental. Dicho esto recordamos que muchos llamados budas, una vez librados del samsara hay creado sus propias tierras puras (universos personales)

El Mahabharata y los Puranas están colmados de historias correspondientes a los diversos yugas, los cuales describen escenas de personajes que vivieron extensos períodos de tiempo. 
Un ejemplo de esto es el del gran sabio Vishwamitra, el cual meditó bajo el agua durante unos 60.000 años, antes de que su meditación fuese interrumpida por la hermosa Menaka.

Vishwamitra y Menaka.

Del mismo modo, en otros Puranas, se dice que aparecen diez avatares (reencarnaciones) de Vishnu a lo largo de los ciclos Yuga. Rama aparece siempre en el Treta Yuga, Krishna aparece al final de Dvapara y Kali. El último avatar viene al final del Kali Yuga para destruir todas las cosas y preparar el camino para el próximo Satya Yuga.


[Para cerrar este articulo, cabe mencionar la insólita similitud entre el calendario Maya e Hindú. Según la ciencia actual estas distantes culturas nunca llegaron a relacionarse; pero la similitud excepcional de sus calendarios está ahí. ]